La tubería de fundición sufrió una rotura total en la solera de dimensiones 50cmx40cm aproximadamente, tras ser accidentalmente perforada cuando se realizo una intervención de perforación dirigida cercana. No era posible mantener en servicio la conducción tras esta rotura grave y era necesario una intervención rápida con garantías de capacidad estructural y de estanqueidad, aplicable en tuberías de transporte de agua potable y con método sin zanja. La red trabaja a una presión de 15 bares.

Los trabajos preparatorios consistieron en realizar una reparación provisional con mortero estándar de la rotura, eliminar el revestimiento interior de la conducción hasta llegar al metal, seguido de la preparación del substrato mediante sistema abrasivo. El sistema de refuerzo PRF que diseño y instalo PIPELINE INFRASTRUCTURE incluyo en una primera etapa una imprimación especialmente adaptada al substrato que mantenía humedad, se instalaron Varias capas en sentido circunferencial y longitudinal de compuesto de carbono de resistencia a tracción superior a 900MPa. El refuerzo se aplico sobre una longitud de 1m30 y la obra se completo en apenas dos días. La prueba de presión se realizo con éxito a 18 bares.

Esta solución fue sin duda un acierto y una tecnología que convenció el cliente, por su efectividad en los tiempos de ejecución, en el ahorro económico que supuso, en las garantías de resistencia y durabilidad que aporta el producto, y por las ventajas que conlleva una tecnología sin zanja al evitar el tener que realizar excavaciones con las molestias y dificultades siempre asociadas.